Adoctrinament? (8)

La lliçó XVII, DINASTÍA BORBÓNICA: FELIPE V, FERNANDO VI, CARLOS III Y CARLOS IV, ocupa una pàgina i consta de 6 paràgrafs (89 a 94) i la XVIII, LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA: FERNANDO VII, n'ocupa dues i consta de 8 paràgrafs (95 a 102).

Destacarem que, ni en el paràgraf 88, últim de l'entrega precedent, ni en els lacònics 89 i 90 que obren l'actual, es fa cap esment del Decret de Nova Planta que, segons molts historiadors, és el que consagra la unitat d'Espanya en sentit estricte: un estat centralitzat i uniformitzat sota las lleis de la Castella guanyadora del conflicte; perquè, en haver apostat per l'Arxiduc Carles d'Habsburg, la corona d'Aragó va desaparèixer com a tal i, amb ella, les seves institucions i lleis.

89. Felipe V es el primer soberano de la dinastía borbónica que ya reinaba en Francia.

90. Felipe V, para poder afianzar la corona, tuvo que sostener la larga y sangrienta guerra de Sucesión que asoló a nuestra Patria durante doce años. En ella perdimos la plaza de Gibraltar que no hemos podido recuperar después.

91. Fernando VI fue un rey bondadoso y amable, que evitó tomar parte en guerras, aumentó la riqueza y protegió la marina, las ciencias y las artes.

92. El reinado de Carlos III es el más brillante de la dinastía borbónica. El país alcanzó gran prosperidad y se construyeron muchos edificios públicos.

93. Un borrón ennegrece el reinado de Carlos III: es la expulsión de los Jesuítas, conseguida por ministros masones y sectarios con perjuicio de las ciencias y las letras españolas.

94. En el reinado de Carlos IV, hombre bondadoso y débil, nuestra escuadra fue deshecha en la batalla de Trafalgar, a pesar del heroismo de nuestros valientes marinos, especialmente de Churruca y Gravina, que sucumbieron gloriosamente,

95. Llamamos Guerra de la Independencia la heroica lucha del pueblo español contra los franceses que, pérfida y traidoramente, invadieron nuestro suelo en 1808.

96. Napoleón Bonaparte, emperador de los franceses, fingiéndose nuestro amigo y valiéndose de engaños, consiguió introducir en España un ejército francés que traidoramente se apoderó de nuestras plazas fuertes.

97. El 2 de mayo de 1808 empezó la Guerra de la independencia, es decir, el levantamiento general contra los franceses. Napoleón había dispuesto que la familia real saliera para Francia, pero el pueblo de Madrid se opuso a la partida y los soldados franceses hicieron sobre él una descarga, que provocó la indignación contra el traidor ataque. En el encuentro murieron muchos patriotas, entre ellos los dos valientes oficiales Daoiz y Velarde.

98. Los franceses en poco tiempo se apoderaron de casi toda España, pero fueron derrotados por el general Castaños en Bailén, haciéndoles 20.000 prisioneros. Ésta fue la primera humillación del ejército de Napoleón y la demostración de que no era invencible.

99. Zaragoza se inmortalizó en los dos sitios que sostuvo durante la guerra. El pueblo luchó con heroismo incomparable y hasta las mujeres hicieron prodigios de valor, sobre todo la inmortal Agustina Zaragoza que, con energía varonil, disparó el cañón junto al cual yacía el cadáver desangrado de su prometido. La Virgen del Pilar que, como dice la jota, "no quería ser francesa sino capitana aragonesa", sostuvo el ánimo de los zaragozanos que no se rindieron hasta que el hambre y la peste imposibilitaron toda resistencia.

100. También Gerona se inmortalizó en tres sitios sucesivos, durante los cuales se registraron actos tan heroicos como los de Zaragoza.

101. La guerra duró seis años. Los franceses, que habían empezado por apoderarse de casi toda España, fueron después derrotados en muchas batallas y obligados a traspasar la frontera y permitir el regreso de Fernando VII.

102. Consecuencia funesta de la guerra fue que todas nuestras colonias, a excepción de Cuba y Filipinas, se declararon independientes.

Observeu que no hi ha cap referència a Josep I Bonaparte, als aliats anglesos ni a la Constitució de 1812, i que Ferran VII, el Borbó més impresentable que hem hagut de patir mai, només treu el cap en el títol de la lliçó i en el penúltim paràgraf, i no se sap ben bé d'on surt.